PASO VI: TODOS A UNA FUENTEOVEJUNA

El FIB es un lugar donde sin duda vas a pasártelo bien, pero recuerda que estás en otro país, en otra cultura, en territorio hostil, por lo que debes cumplir a rajatabla la siguiente premisa: teneis que hacer todo todos igual, y todos a la vez. Mejor en (gran) grupo que en avanzadillas de pocas unidades. De sobra es conocida la leyenda del monstruo Comeguiris que devoró a una pareja de Southampton hace unos años, un día que se les ocurrió ir a comer a un bar de menús sito tres calles por detrás de la iglesia, y pidieron sopa cubierta.
Por ello, debereis tener en cuenta que los guiris sois uno, y ese uno os dará la fuerza. Os dará el poder.

Ejemplos:
– Llegar.- Como ya hemos comentado en el punto I, debeis llegar todos a la vez, el mismo día, a ser posible en el mismo cámping. Como esto no es factible, dividíos lo más exactamente posible en dos, y colonizar ambos sitios; todos juntitos, eso sí.
– Playa.- Todos los días a la playa. A la misma playa, claro. El Torreón debe ser por unos días una prolongación de Gibraltar. Visto de arriba, la playa debe ser un continuum de carnes sueltas rojas, bañadores horteras y colchonetas hinchables de colores. Que no se vea la arena. Os servirá de entrenamiento para cuando vayais a Benidorm.
– Supermercado.- Todos al súper al volver de la playa. Ni se os ocurra pisarlo por la mañana, cuando está más vacío de gente. La zona de las cajas, así como los lineales de la bebida y del jamón de york deben parecerse a los alrededores de la Kaaba en plena peregrinación. Comprad además siempre lo mismo: pan de molde, una sandía para dejar al sol abierta delante de la tienda, jamón de york, agua, muchas latas de cerveza marca blanca, y vodka. Y tres bolsas de papas por cabeza, que no falten. Lo demás es innovar, alejarse de la manada. Cuidado.
– Cenar.- lo ya comentado en el paso IV: La calle principal, la de la iglesia, y la paralela, la de los menús FIBers. El Comeguiris acecha. Nunca más allá. Si acaso en el cámping, claro. Pizza del bar del cámping o sandwitch de yamón de york calentado al sol. Rico, rico.

– Festival.- En el festival debeis comportaos como uno sólo. Es difícil pero sois capaces, lo sabemos. Confiamos en vosotros. Debeis aparecer en masa por el recinto cuando toca el primer grupo británico lo suficientemente grande o hypeado. Quiero decir, todos allí cuando el primer portada del NME empiece a tocar. Si toca en el Verde, quien no llegue se le expulsa del país. Así que a correr. Debeis ir todos disfrazados, además, o vestidos de forma que parezca que lo estais. Después, debeis ir llenando escenarios donde tocan grupos de moda por las islas, y en los descansos, a beber a las zonas de descanso. Ni se os ocurra visitar una carpa donde suena un grupo que no conozcais, y mucho menos si es o parece español o canta en un idioma que no sea el inglés. El Comeguiris, de estar en el recinto, estará allí sin duda. Emborrachaos a la vez a base de cerveza y vodka con limón, el resto de bebidas no existen. A altas horas, con el recinto a tope, debeis repartíos bien: mitad en las carpas y/o el verde, mitad durmiendo donde se pueda o donde se caiga. Es importante el equilibrio.

– Fiesta de la playa.- Todos recordais la Fiesta de la playa de hace unos años. Era una pasada. Si no llegasteis a ir, habeis escuchado hablar de ella, es lo más comentado por los veteranos sin duda. Pese a que se eliminó en parte por vuestra culpa, seguís preguntando por ella en los foros nacionales e internacionales. La fiesta de la playa es lo más importante del FIB. Como no hay una fiesta oficial, teneis que crearla vosotros. Una el lunes, otra el martes, otra el miércoles, y la más importante, la del lunes final. La traca final. Para esa, abandonad el cámping y asaltar las tiendas para comprar cubos y todo tipo de bebida, lo que quede. Botellas de litros de refrescos de marcas raras más baratas que el agua, vodkas koreanos y demás. Bajais a la playa, os lo bebeis todo, y a desfasar. Y sin música ni nada. Lo más divertido es mear, cagar y fornicar dentro del agua. A los lugareños además les encanta que jugueis a quemar las pasarelas de madera, que pongais vuestros nombres en ellas con llaves, que rompais la barandilla de obra del paseo y que dejeis aquello como si fuera vuestro cámping soñado: sin un centímetro cuadrado sin mierda. La fiesta en la playa es lo más, sin duda. Que se lleven buen recuerdo de vosotros los lugareños, visitantes e instituciones. Y que algunos de vuestros paisanos se piensen lo de nacionalizarse moldavo por vergüenza.

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